Cool cold

Y así, con las mandíbulas doloridas de comer tanto turrón, intentándonos cerrar el ultimo botón del pantalón y con especial entusiasmo puesto en este nuevo año, volvemos a la rutina. Cada año se me pasan más rápido estas semanas de descanso y excesos que tenemos. Así pues, un enero más, vuelvo a enfrentarme a un nuevo semestre y a la idea de que el despertador va a ser mi mejor amigo.

Esta última semana, he cerrado mi periodo vacacional en Granada, y de verdad, que agradecí que el sol se posara sobre mi blanca piel, aunque solo fuera por un instante, ya que la niebla había invadido mi vida durante los últimos meses. Dicen que nos esperan días fríos, y yo, cada vez que miro la aplicación del tiempo y veo el icono de nieve sobre la ciudad de Pamplona echo a temblar. Por ello y, además, teniendo en cuenta que aún sigo con secuelas de la gripe vivida, mis últimos outfits son especiales abrigados.

Así pues, optó por uno de mis looks punteros esta temporada. Pantalones de Armani Jeans, característicos porque por la parte delantera son de eco piel, mientras que por la trasera son elásticos. Una blusa de gasa de Tara Jarmón de la que no me separo, no solo porque es súper cómoda sino porque además es perfecta para cualquier conjunto, la estoy amortizando de una manera sobrehumana. Y finalmente, un chaleco de punto de Liu·Jo. Para no pasar frío, además incluyo en el outfit, un abrigo de color lima de Paul & Joe Sister y una bufanda de Armani. Ambas prendas son las encargadas de aportar luz y color al conjunto. Como complementos, unos botines de charol de MaryPaz y un bolso de terciopelo verde de Parfois, que ha sido uno de los aciertos que los Reyes Magos han tenido este año conmigo.

Bajan las temperaturas, pero ello no quiere decir que baje el estilo. Muchas veces el frío nos permite jugar con más prendas y crear un total look digno de cualquier neoyorkina del upper east side que camina sobre el nevado Central Park con su chai latte en la mano (sí, obviamente estoy pensando en Olivia Palermo).