viernes, 18 de abril de 2014

¡Llévame de calle!














Semana de reencuentros, tradiciones, costumbres, comidas familiares, procesiones, ilusiones y pasiones. Este año, hemos decidio pasar la Semana Santa en Navarra. Gracias a mis queridos examenes finales a la vuelta de la esquina no podre escaparme a mi preciosa Granada, pedirle al Cristo de los Favores o ver bailar a "la Aurora". Sin embrago, que mis padres vengan a Pamplona-Tudela y estemos la familia al completo (perro incluido) hace que vuelva a vivir esta semana como en mi niñez, cuando aún no nos habiamos cambiado de ciudad: ser carrapuchete (nazareno para el resto del mundo) en el Cristo de la Caña, asistir al Angel, comer los buenos espárragos de temporada, ir a tomar el vermut en familia, correr para coger el sofa bueno y si hay suerte, el mando (mis primos luchan con cuerpo y alma por ver los dibujos pero Matias Prats es un miembro mas de la familia). Donde el buen tiempo acompaña, los tambores no paran de sonar, la ropa ligera alza la voz desde el armario, encontrar una mesa con sombrilla en una terraza se convierte en toda una proeza y tu afán por estrenar los zapatos de temporada pasa factura con unas coquetas rozaduras. Dicen que es una fecha de recogimiento, para mi es una fecha en la que la familia "se recoge" pero para hacer cosas juntos: se inicia a los pequeños en el arte de los cofraces, en las comidas al aire libre obligatorias y en intentar no revolucionar la casa con sus travesuras e insistencias por ir a pasear con el perro (sea la hora que sea). Esta es a mi manera, una de las mejores formas de pasar una Semana Santa en condiciones.
Ante el radiante sol del viernes santo opto por un conjunto muy "in". Vaqueros grisis de Liu*jo estilo boyfriend con una camisa de cuadros de Armani. Una prenda diferente por su escotado cuello adornado con volantes. Una camisa muy sencilla pero que tiene un toque retro que la diferencia. El galardón de oro en este look es para los zapatos y el bolso. Salones de charol con una afilada punta con ribetes de metal (Uterqüe) y un estupendo "Birkin" (Hermès) de color morado que aporta serenidad y juventud al outfit.
Diré, que otro factor que ha añadido su "pro" a la lista de celebrar la Semana Santa Tudelana ha sido que mi tío haya sido este año el pregonero de la misma (si no lo menciono en este post me mata). Espero que con esta propuesta os lleveis esta semana de calle.

lunes, 14 de abril de 2014

Carpa Diem










Como lo prometido es deuda, aquí va un post un tanto peculiar. El viernes, 11 de abril, vivimos en Pamplona una de las macrofiestas más esperadas para los universitarios, "La Carpa". El eslogan al que va asociado este evento es Carpa diem y claro está que lo seguimos a pies juntillas. Aprovechamos un día espléndido, donde el sol brillaba, el calor apretaba y las conversaciones fluían. Era un ansiado día que por fin llegó y dió los frutos prometidos. 

Desde por la mañana, estuvimos dando guerra, queriamos subir al karaoke pero la avalancha humana que había para cantar "una chica yeyé" nos pareció excesiva, asi que optamos por cantar a pleno pulmon pero sin subir al escenario. Las horas pasaban y no nos dabamos ni cuenta, solo reíamos, saltábamos, saludabamos a gente conocida e ibamos de barra en barra para decidir cual era la más original. Es un evento en el que las diferentes carreras "intentan" recaudar dinero para sus futuros viajes por ello, cada año, son los estudiantes los que cambian las temáticas de sus barras. Este año Magisterio se disfrazaba de los verdaderos cocineros de Master Chef, Económicas hacia tributo al "Lobo de Wall Street" e Ingenieria Mecánica mostraba sus habilidades con motos voladoras. Intentamos llenarnos el cuerpo de pegatinas que regalaban, a cada cual mas ingeniosa: "todo lo que mola despeina", "tienes cara de no haber cuadrado un balance en tu vida" o "él del crack del 29 a mi lado no era nadie". Los adornos, las gafas polarizadas, los vasos de colores, la música de ayer y los reencuentros inundaban el lugar. El buen tiempo hizo que me quemara la cara y parte de los brazos, soy muy delicada lo sé, pero es que el sol y yo no nos solemos llevar bien. Si dicen que la primavera las sangre altera, entonces, la carpa de primavera la revoluciona. 
Para aquellos que nunca hayais venido o que estéis interesados en vivir una fiesta de mas de doce horas, esta es la ocasión que buscabais. La Carpa también se realiza a mediados de octubre, el animo no decae pero la temeratura no es la misma. La Carpa de primavera del 2014 ha sido un evento lleno de anécdotas, de comienzos, de diversión, de amistades, de carcajadas, de sentadas en el suelo, de recuerdos y de buena compañía. A lo cual, le sumamos que los tacones se quedan en casa, el maquillaje te importa tres pepinos y no mancharte no es una de tus prioridades. 
Solo quedan seis meses para la próxima, asi que, comienza la cuenta atrás. Siempre Carpa Diem

martes, 8 de abril de 2014

Festival del cine









Es curioso ver la rapidez con la que están cerrando numerosos cines de nuestro país, cada vez asistimos menos a sus sesiones, la idea de comprar palomitas ni se nos pasa por la cabeza, eso si llevamos el bolso lleno de "chuches" que compramos fuera del establecimiento. En mi familia, existía la tradición de ir al cine los domingos para pasar la tarde. Poco a poco esa costumbre desapareció y desde que llegué a Pamplona me he pasado los domingos estudiando o maldiciendo mi genial sugerencia de salir el sábado (también conocida como resaca). Es sorprendente como ha disminuido este "ocio" en pocos años. Pero lo verdaderamente sorprendente es ver que cuando hay promociones, descuentos o el aclamado festival del cine, las salas se llenan incluso en la sesión de las cuatro donde más que ver una películas intentas no echar una cabezadita. Largas colas rodean el lugar y luchas por conseguir una buena butaca, nada de la primera fila en una esquina pero, o compras las entradas con antelación o la torticolis te acompañara durante unos días. 

Hay quejas y protestas sobre la destrucción de la cultura acusando a la piratería como la principal culpable. Pero se ha demostrado que la asistencia de los ciudadanos esta más que confirmada cuando los precios son asequibles. Corren tiempos difíciles y algunos consideran que pagar una cantidad elevada (por entrada) en una película que puede que ni les guste es malgastar el dinero. Muchas veces tenemos la solución ante nuestros ojos pero no la vemos. Es cierto que por mucho que disminuyera el precio los cines no iban a salir de la "crisis" en la que están, sin embargo lo que considero que no pueden hacer es subir cada vez mas el precio, en algunos cines la entrada puede llegar a costar diez euros y dependiendo de la situación en la que te encuentres ese dinero puede sacarte de apuros y una película no.
La semana pasada acudí al festival del cine que se celebraba en toda España. El taquillazo "Ocho Apellidos Vascos" no podía pasar desapercibido ante mis ojos. Cuando llegué a la sala correspondiente he de decir que me agobie: ¡Cuanta gente, no se si vamos a tener oxigeno suficiente para todos!-le decía a mi amiga entre carcajadas. Asombroso, alucinante, hacia años que no veia una sala completa. La pelicula , obviamente, no decepcionó. Además, yo que soy medio andaluza y medio navarra veía reflejada a la perfección la manera de ser y de vivir de unos y otros. Reí, reí y volví a reir. Se me ponían los pelos de punta cuando veía los hermosos caserios rodeados de la mas verde vegetación y cuando cantaban los del Río. Nunca sabre a que comunidad pertenezco más, si a la del sur o a la del norte, pero como decía aquel spot publicitario: " todos necesitamos un poco de sur para poder ver el norte" y yo por suerte cuento con ambos.
El look que escogí para este acontecimiento fue sencillo y sobre todo cómodo. Pantalones negros skinny de Seven acompañados por una camisa blanca de Calvin Klein y una chaqueta de punto larga (estilo Chanel) de la marca Paul&Joe. Como complemento estrella, los zapatos de River Island con su "discreta" plataforma dorada. Para dar mas color al outfit y que no predominara en abundancia el negro y blanco (aunque sean colores con los que siempre se acierte) propongo un collar rosa. Es un estilo de collar por el que apuestan numerosas casas de bisutería para esta primavera. Simple, original y diferente.
El cine para mi es una pasión, pero poco a poco va a ir desapreciendo, simplemento por prioridades.

lunes, 7 de abril de 2014

¡Sorpresa!










Lo sé, lo sé, he estado una semana sin dar noticias, pero es que siempre por una cosa u otra acabo haciendo de todo menos escribir. Tengo que decir, que durante este tiempo he estado escribiendo pero no he decidido publicarlo. Eran reflexiones, algunas, bastante complicadas de expresar, que producen controversia o que simplememte no llegan a quedar tan perfectas como tu esperas, por lo que desechas de la mente la idea de "postearlas". Sin embargo, ahora, ya estoy mas centarada y espero publicar al menos tres "posts" esta semana. Supongo, que el que mas aceptación tendrá, sobre todo para los universitario de Pamplona que no se pierden una (habla la voz de la experiencia), será el que lleve asociado el titulo de Carpa. Para aquellos que estudien fuera de esta hermosa Comundiad Foral, la Carpa es un evento en el que todos los universitarios (y pre-universitarios) se unen para realizar una de las fiestas mas esperadas del año. Pero bueno, no adelantaré acontecimientos, simplemente decir, que los nervios de que llegue el viernes no es que se palpen en el ambiente sino en las cinco sugerencias que tengo en mente de como ir vestida.

El fin de semana pasado, cumplio veinte años una de mis amigas. Ella es canaria, y cumplir las dos decadas fuera de casa, es "duro". Así que decidimos organizarle una fiesta sorpresa que le hiciese sentir como en casa, y para ello, ¿qué mejor que organizarle una "party" con sabor canario?. Nos pasamos días pintando un mural que quedara decente ya que nuestras habilidades pictóricas eran practicamente nulas, compinchamos a media ciudad para que la entretuvieran mientras nosotras organizabamos todo, amigos, compañeras de piso y hermana incluida (que habia venido a pasar una semana en Pamplona) echaron una mano. Inflamos globos hasta quedarnos sin aliento, "cocinamos" cosa que no era nuestro punto fuerte (soy de las que fríe las croquetas a cincuenta metros de distancia por miedo a que salte el aceite), preparamos todo tipo de complementos de fiesta divertidos que se han convertido en un "must" para fiestas de cumpleaños: labios, bigotes, gafas, pajaritas, bocadillos con frases tipicas de la veinteañera....
Creo que cuando nos vió a todos en su casa, casi nos mata, basicamente porque no estaba preparada (fisicamente hablando) para recibir a gente y lo primero que dijo despues del "gracias" y "me ha encantado mis niñas" fue "me voy a cambiar". En ese momento pense, ¡que coquetas somos las mujeres!. Luego nos llaman superficiales, pero celebrar tu cumpleaños y mas tu veinte cumpleaños en vaqueros cuando todas tus amigas van subidas a los andamios, conocidos comúnmente como tacones es de esperar que la anfitriona corriera a abrir el armario y formulara la pregunta más usual en nuestra vida: ¿qué me pongo?
Al final, todo salió como planeamos pese a corridas, nervios, largas conversaciones con los ganchos para marearla, la actuación de una amiga para distraerla (como minimo se mereció un Óscar), pintarnos la ralla del ojo en medio segundo y encender las velas sin incendiar la casa. Fue un cumpleaños diferente donde la reina del carnaval triunfó, buceamos de noche por playas paradisíacas, reimos, bailamos y vivimos en una hora menos.