Parece mentira...

 Zapping. Acto cotidiano que realizamos cuando vagueamos en el sofá, nos aburrimos o 

simplemente cuando queremos buscar algo con sustancia. La calidad de la televisión esta disminuyendo a una velocidad vertiginosa, pasamos varios minutos hasta poder encontrar una programación que merezca la pena. Un día como hoy, miércoles, si no hubiese sido por este acto, habría abrazado mi preciosa cama a las diez y media aproximadamente. Sin embargo, esto no ocurrió. Sin comerlo ni beberlo apareció ante mis ojos un nuevo programa en la dos Tve (imaginen mi nivel de aburrimiento hasta llegar a ese canal) que poco a poco comenzó a captar mi atención. Era un programa capitaneado por Alaska y Coronas, de ahí el título del mismo, que pese a ser un formato que ya habia tenido éxito con otros presentadores, tenía todas las papeletas de ser un fracaso. Sin embargo, me hizo pensar bastante sobre los temas que trataban, sentía que interactuaban conmigo cosa que pocos programas de actualidad consiguen. El tema a tratar en su estreno era el cine, para ello contaban con dos de los actores que habían ganado el premio Goya el pasado domingo: Javier Cámara y Miriam Álvarez. La gracia del primero y la dulzura de la segunda hacían que el "topic" propuesto tomara forma, hasta llegar a la pregunta clave de la entrevista: ¿Por qué los españoles cuando ven una película creada en su propio país dicen "parece mentira que sea española" cuando les agrada?. Es cierto que el cine español ha tenido numerosas críticas, ha habido películas inigualables y otras bochornosas. Sin embargo, en los últimos años, el cine español se encuentra en la cúspide. Es cierto, son muchos los periodistas extranjeros que preguntan a los actores españoles por qué creen ellos que el cine de nuestro país esta siendo uno de los más destacados. Lo sé, puede parecer una incoherencia, pero no lo es. ¿No será que los propios españoles nos infravaloramos?. Es curioso como los extranjeros nos envidian por nuestra gastronomía, geografía e incluso forma de ser. Sin embargo, nosotros nos decantamos por el sushi como comida "in", preferimos Cancún a nuestras espectaculares Islas Baleares o Canarias y esperamos conseguir la eficiencia de los japoneses para poder optar a su nivel de vida. ¡Es cierto, nos subestimamos!. No somos conscientes de la cultura y el arte que tiene España. Contamos con grandes diseñadores, escritores, deportistas, cocineros, pintores, actores y un montón de "ores" más que hacen que España sea distinta. Nuestro país no esta pasando por su mejor momento, la gente sufre como nunca lo había hecho por trabajo, alimemtación, salud y educación. Las manifestaciones se han vuelto como los desayunos, la comida mas importante del día y la esperanza, que es lo último que se pierde (o eso dicen) casi es inexistente. Sin embargo, la proyección que damos al exterior pese a todas las adversidades que vivimos es bastante positiva. No nos damos cuenta de que no somos los únicos en esta situación, EEUU está peor que nosotros pero como lo vemos como una superpotencia apenas le prestamos atención. Su nivel de deuda es altisímo y las soluciones propuestas no son las mas adecuadas. Pero centrándonos en el tema,  parece mentira que no sepamos quienes somos. Somos personas con sangre en las venas, con bulerías o jotas como canción de cuna, con toros, con aceite de oliva, con risas, con lloros, con aspiraciones y sobre todo con arte. Saldremos de la situación en la que estamos, antes o mas tarde, cambiaremos la política que impera hoy en día donde el robar dependiendo de tu estatus es impune y conseguiremos un país mas justo, donde personas culpables paguen por sus delitos (me ha salido la jurista que llevo dentro, ya disculparán). Al fin y al cabo, toda esta reflexión me lleva a la cuestión principal, cuando veamos algo "Made  in Spain" que sea brillante hasta decir basta digamos "¡COMO SE NOTA QUE ES ESPAÑOL/A!"