Dicen que detrás de un hombre siempre hay una gran mujer, ¿y detrás de una mujer?. Nosotras somos autosuficientes, no necesitamos ayuda y nos valemos por nosotras mismas. Realmente, ¿eso es verdad?. Hace pocos años eran las mujeres las que llevaban sobre sus hombros el peso de toda la casa: lavar, planchar, cocinar, cuidar a los niños, sumado a las horas laborales en la oficina correspondiente. Sin embargo, todo esto ha cambiado o por lo menos parcialmente. Las tareas del hogar se reparten e intentan ser equitativas con el objetivo de que nadie sea mas que nadie. Estamos en la época del progreso, de la igualdad o por lo menos eso nos quieren vender. Aunque parezca mentira, estos aspectos afectan también a la moda, es gracioso como compramos una figura femenina, independiente y libre pero realmente lo que predomina en el mercado son prendas oversize. No somos conscientes pero estamos siguiendo una moda, y yo me incluyo, masuclina. Los pantalones bajos y anchos son un must esta temporada y si encima los remangas entonces ya eres "in" totalmente. Pero, yo, al entrar en la facultad veo que ese estilismo predomina total y aboslutamente entre los hombres. Quizás en eso consiste la igualdad, en que seamos unisex. Es un ámbito que nunca llegaré a controlar, ellos llevan mas escotes que nosotras y en cambio, nosotras somos mas masculinas que ellos. Hemos cambiado los roles. Por tanto, ante esta tesis, concluiría con un "nadie esta detrás de nadie". La igualdad ha conseguido que los tópicos se rompan, eso sí, la feminidad y la elegancia en una mujer nunca estan de más aunque lleve un look diseñado para un hombre.
Ante esta reflexión, que puede ser tanto compartida como contrariada, propongo un look oversize. Pantalones holgados y desgastados de Liu&Jo jeans decorados con tachuelas redondas pequeñas en los bordes de los bolsillos a modo de brillantes. Este estilo de vaqueros están muy promocionados por las bloggeras mas punteras. El truco esta en remangar el pantalón, lo que permite que el estilismo sea mas masculino y reinventa la prenda. Para darle mas sensación oversize opto por una camisa blanca que no es ajustada, todo lo contrario. Es una prenda que puede llevarse tanto por fuera como por dentro del pantalón. En esta ocasión escojo la segunda opción y para "feminizar" el resultado me decanto por un cinturón en tonos rosas y morados con una hebilla en forma de flor. Será este accesorio junto con los zapatos de tercioplo rosas los encargados de enfocar el look al sector femenino. Recomiendo este tipo de pantalones con bailarinas o zapatos de salón para quitarle informalidad a la propuesta. Ante todo, aunque "copiemos" estilismos masculinos seguimos siendo mujeres y los tonos rosas o colores llamativos en estas propuestas nos permiten recordarlo y sobre todo, recalcarlo. Finalmente, el factor rockero lo aporta la chupa de cuero (Belstaff) que se inició como un must en los "malotes de turno" y sino que se lo pregunten a las protagonistas de Grease.
Hay muchas teorías sobre porque las mujeres tendemos a combinar prendas de tendencia masculina en nuestro vestuario, la mía propia es que nos da fuerza, nos hace sentirnos seguras y sobre todo hace que creamos que nos miran como iguales. Muchas veces se pretenden ocultar las curvas bajo prendas oversize para que sea tu inteligencia la que predomine en vez de estas.
Sinceramente, esta propuesta me encanta pero hay que tener en mente siempre los complementos necesarios para realzar a la mujer, no estamos dispuestas a que nos saluden con un "¿que pasa tronco?"
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