Monaiteras en Pamplona

Fue hace dos días cuando la Universidad de Navarra me envió un email para solicitarme la asistencia a una visita de mi facultad con mi antiguo colegio, Monaita. Querían que aportara mi experiencia personal sobre mi vida en el campus, los profesores y sobre todo, dar una visión mucho mas cercana. ¿Yo? ¿Dando una charla? Me lo plantee mucho si ir o no, pero finalmente accedí. Que recuerdos han venido a mi mente cuando he visto a las "monaiteras" en mi facultad. Solo hace dos años, era yo una de ellas a la que le daban una charla relacionada con su futuro y el comienzo de la toma de sus propias decisiones. Y ahora, estoy en segundo de carrera y con un estilo de vida totalmente diferente. No se si  habré convencido a alguna de que la Universidad de Navarra es una buena opción pero al ver a mis "seños" y a alumnas que hace nada eran las pequeñas del cole y ya no lo son, han venido muchísimos buenos recuerdos de mi paso por un estupendo colegio donde no solo me llevo amigas sino muchas anécdotas y una formación personal de la que estoy muy orgullosa.

Hoy he optado por un look sencillo ya que ante todo, estoy en la facultad pese a tener invitadas especiales. Llevo unos pantalones azules de Armani ( ya expuestos anteriormente) con una camiseta de Amaya Arzuaga que me encanta. Es corta y posee una doble manga, una parte de color blanco y otra gris, creando el efecto de llevar dos camisetas puestas. La cazadora es azul oscura con acabados de cuero color beige, es de la firma Dinou. Es una prenda muy práctica porque no solo abriga sino que al estar "plastificada" es perfecta para los días de lluvia. Como en Pamplona nunca se sabe el tiempo que va a hacer, mejor prevenir que curar. Las botas, fueron un regalo de mi abuela en Navidad. Son ideales no solo por el color sino también por la cuña escondida que hace que unas simples deportivas te hagan crecer unos centímetros. Para rematar, opto por un maxi-bolso de Prada azul oscuro con asas grises que combina a la perfección tanto con el pantalón como con la camiseta.

La verdad es que echo mucho de menos el Monaita, no solo por estar en Granada que es donde se encuentran mis padres actualmente viviendo sino porque he vivido tanto buenos como malos momentos en él, pero no los cambiaría por nada. Siempre seré Monaitera.