Hace tiempo que ví la pelicula "En sus zapatos", no es el peliculón del siglo pero Cameron Díaz no actua mal y en una tarde de lluvia, la opción no se descarta. Como bien dice el titulo, los protagonistas de la película, o por lo menos a mi modo de ver, son los zapatos: Manolo Blahnik, Louboutin, Gucci y Prada. Ese zapatero con el que todas las muejeres soñamos y que solo las celebrities consiguen tener. Si, me podéis decir que soy una superficial y que la película intenta inculcar otros valores. Totalmente de acuerdo, pero a un intento de bloggera le llama mucho mas la atención, todo el repertorio de looks que muestran las actrices que las incomprensiones que sufren las mismas (partiendo de la base de que la película es una autentica 'americanada'). Hoy se me ha venido a la mente este largometraje cuando he decidido ponerme, unos mocasines azules marino, mas comúnmente conocidos como Castellanos. Ha sido un autentico momento de ¡en mis zapatos! porque he recuperado mis queridos castellanos que usaba en el colegio. Es un calzado que se ha convertido en tendencia para este otoño-invierno, cuando yo hace tres años los usaba a todas horas. La moda es totalmente cíclica, todo vuelve y guardar zapatos como estos merece la pena, no solo porque deben ser un 'must' sino porque traen recuerdos a la mente de los momentos vividos en mi querido Monaita. Cuantas veces nos habrán dicho que no arrastrásemos los pies, que la falda la llevabamos muy corta o que las uñas de colores no combinaban con el uniforme. Muchas veces me gustaría volver a esa época, aunque solo fuera por una semana. Nunca pensé que todo cambiaría tanto y que el tiempo pasase tran rápido.
Hoy en honor a mis: ¡in my shoes! propongo un outfit sencillo pero mas original que las faldas con tablas del colegio. Vestido-jersey de Paul&Joe Sister ajustado por la zona inferior y oversize en la superior con una cazadora estilo militar decorada con insignias. Bolso plateado a conjunto con los aros de plata como únicos accesorios y ¿qué zapatos?, mocasines azules.
Ahora empiezo a entender porque mi abuela guarda todo, no solo porque lo vintage y retro se lleva sino porque los recuerdos siempre perduran.
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